domingo, 27 de abril de 2014

Visita del P. Fernando Millán, Prior General


El próximo día 16 de mayo con motivo de la celebración de los 50 años del Colegio ‘Virgen del Carmen’ nos visitará el Prior General de la Orden.
Queremos que sea un día de encuentro, de Familia Carmelita, de acción de gracias, de abrir nuestras puertas a las autoridades del pueblo de Onda, a los que como nosotros comparten la tarea de educar y acompañar a jóvenes. Queremos que sea un día inolvidable para toda la comunidad educativa del colegio.  

sábado, 12 de abril de 2014

Al comienzo de la cena

Celebramos ayer una gran cena dentro de las celebraciones de los 50 años del colegio. Nos juntamos miembros de la comunidad educativa de antes y de ahora, de hoy y siempre. Familia, mucha familia. 
Al comienzo de la cena hicimos una oración. Un recuerdo de detalles de la realidad, el Papa Francisco nos pide orar con la realidad... 

  • La Luz. Cientos de velas encendidas durante los cincuenta años. Luz buscada, regalada, pedida, disfrutada… para no perderse, para rezar, para iluminar los corazones. ‘Yo soy la Luz del mundo…’
  • Gomas de borrar. Guiar para aprender. Borrar es nuevas posibilidades de hacer, de construir. Cuántas orientaciones, sugerencias, intentos…. Acompañamientos durante cincuenta años. Una goma permanente en nuestra vida es el perdón de Dios.
  • Lápices. Aprender a escribir para dejar huella, para repasar la lección, para comunicar sentimientos, para contestar un examen… Lápices para colorear lo gris, para llenar de color y de vida lo vacío. Sin salirse de la línea o inventar lo nuevo siendo creativos. Durante cincuenta años se ha escrito mucha historia en el corazón de muchos.
  • Tizas. Trabajo, mucho trabajo, mucho esfuerzo… pizarras y pizarras de propuestas, de contenidos, de valores, de esquemas, de palabras. Tiza que mancha las manos con el esfuerzo diario, la generosidad, la grautidad… Desgaste de vida de muchas personas durante los cincuenta años, gratuidades que llenaron de sentido a niños y jóvenes.
  • Escapulario. Revestidos de Cristo, hermanos de la Bienaventurada Virgen María del Monte Carmelo. Frailes y laicos, laicos y frailes que durante cincuenta años enseñaron a orar, a vivir en fraternidad, a servir a los últimos. Buscadores de Dios.
  • Semillas. ‘Salió el sembrador a sembrar…’ Es la tarea del docente, del maestro… Semillas esparcidas, semillas cultivadas, semillas plantadas en tierras sazonadas para que otros recojan la cosecha deseada. Tarea ilusionante para vocacionados sembradores de futuros posibles.
  • Dulces. Momentos y detalles que dejaron y dejan sabores inigualables de dulzura profunda. Miradas que ensanchan corazones, confidencias que hablan de sentimientos llenos de ternura, lágrimas que llaman al consuelo necesario… Regalos de navidad, finales sonrientes, graduaciones felices y proyectos alcanzados
  • Juegos. Cada día en el patio. Imaginación desbordada, amigos para siempre, palabras reinventadas, teatros imposibles, fiestas permanentes… El juego de la vida que comienza a reinventarse cada día, cada curso, cada etapa… Manejar la suerte, vencer las casualidades… escribir la historia de un yo irrepetible.
  • Escudo. La identidad de Familia Carmelita que en medio del pueblo ha propuesto un mundo diferente y posible. Estrellas para muchos, lugar de primeras amistades, de primeros amores, de fundamentos de vida. Puertas abiertas para siempre, ‘el colegio’ de muchos de nuestro pueblo.